"Mejor es la comida de legumbres donde hay amor, que de buey engordado donde hay odio." - Proverbios 15:17
Muchas personas suelen pensar que tienen todo lo que quieren, pero ignorando que eso no significa que tienen lo que en verdad necesitan. De hecho quizá no tengan nada sustancial, porque muy a menudo lo que es necesario es más importante que lo que se desea. Un abundante asado puede que sea el orgullo de un padre que lo pone en la mesa de su familia, pero ¿de qué sirve si el matrimonio está en crisis y los hijos son insolentes? ¿Acaso no valora más el amor del hogar aquel padre que puede servir una mesa humilde pero donde el diálogo y la franqueza son la atmósfera habitual?
Salomón fue un rey riquísimo cuya ración diaria incluía "diez bueyes gordos, veinte bueyes de pasto y cien ovejas; sin los ciervos, gacelas, corzos y aves gordas." (2 Re. 4:23), pero con el tiempo, sin duda que aprendió que la cantidad no es sinónimo de calidad ni tampoco de saciedad.
Un predicador dijo: "Las riquezas y la pobreza son más un asunto del corazón que de la mano. Es rico quien posee contentamiento. Es pobre quien quiere más" (Hall) - "El universo jamás llenará al corazón mundano, mientras que muy poco es suficiente para el corazón celestial." (Charles Bridges) ¿Acaso no es esto moneda corriente en nuestra sociedad? ¿No ocultan tristeza, dolor, envidias, engaños y amenazas de colapso emocional todos esos bienes materiales, vacaciones costosas y autos lujosos?
He aquí la solución del cielo: "Mejor es lo poco con el temor de Jehová, que el gran tesoro donde hay turbación." (v.16). Cuando Salomón escribió el texto de hoy simplemente estaba ilustrando esta verdad mayor que menciona en el contexto inmediato. El temor de Jehová es limpio (Sal. 19:9) y su mayor virtud es apartar el pecado del corazón del hombre (Pr. 8:13); y si cualquiera que ha estado confiando en la abundancia de lo temporal se vuelve a Jesucristo para obtener su perdón, no solamente será justificado eternamente ante Dios sino que también se conformará con una sencilla ensalada en la mesa pero con abundante amor en el hogar.
¡Dios te bendiga!
-Biblia, mate y oración-
© Copyright Ricardo Daglio - 2013
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