jueves, 5 de noviembre de 2015

SHOW RELIGIOSO

"¡Guías ciegos, que coláis el mosquito, y tragáis el camello!" - Mateo 23:24

    "No es hipócrita quien procura alcanzar una meta y no lo logra; es hipócrita quién no lográndolo aparenta haberlo hecho" (Wiersbe). Los fariseos del tiempo de Cristo habían alcanzado una posición religiosa que les valió el respeto del pueblo pero no porque ellos tuvieran vidas ejemplares de verdad que resultaba de una piedad interior, sino porque la rigurosidad de su conducta externa no era superada por nadie y porque esa era la imagen de la verdadera religión que ellos habían creado y transmitido. El pueblo estaba ciego en sus pecados y transgresiones; Jesús había venido para dar vida, pero los fariseos eran peores que el pueblo porque se transformaron en guías de lo ciegos, una expresión que el Señor utilizó para ejemplificar la gravedad de la condición de ellos.
    Al hablar de colar el mosquito y tragar el camello, Jesús estaba usando un dicho popular de la época; pero ambos, el mosquito y el camello, eran los dos extremos en tamaño de animales inmundos prohibidos para el pueblo judío. De manera que la expresión de Jesús, sin duda que además de contener una característica de humor por su divino oportunismo, explica perfectamente la situación de cualquier hipócrita religioso y legalista: Se puede vivir cuidando detalles que satisfacen el orgullo y a la misma vez descuidar absolutamente lo verdaderamente importante como lo es la justicia, la misericordia y la fe (Mt. 23:23).
    Estamos tan habituados a todo lo que es riguroso y que genera autosuficiencia, porque logramos ser detallistas en cumplir ciertas reglas espirituales como no fallar nunca en tener el versículo bíblico para las preguntas que nos hacen, o mantener siempre las tradiciones de nuestra iglesia, o también jactarnos de tener una tradición familiar religiosa de años; que no estamos ni siquiera enterados que hemos estado ofendiendo a Dios con muestra falta de preocupación por los que no tienen a Cristo, o los hermanos en necesidad de consuelo y afecto fraternal. Estamos colando el mosquito del legalismo y tragando el camello del amor al prójimo. Fue Juan Calvino quien dijo que muchos besan los pies de Dios mientras lo escupen en el rostro al mismo tiempo; ten cuidado de no ser uno de esos hipócritas quienes están tan preocupados en los detalles que descuidan las cosas más obvias en la conducta y la ética cristiana y solamente ofrecen un show religioso con sus vidas. Nos hace bien guardar en nuestros corazones las palabras del profeta Miqueas "Oh hombre, él te ha declarado lo que es bueno, y qué pide Jehová de ti: solamente hacer justicia, y amar misericordia, y humillarte ante tu Dios." (6:8)

¡Dios te bendiga!

-Biblia, Mate y Oración-
© 2013- Ricardo Daglio -Uso personal, no distribuir sin permiso

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